El conjunto marplatense se reencontró con la victoria en casa, luego de dos derrotas, aplastando a Boca, con un contundente, 67-47. La figura y goleador del partido para Quilmes, fue el pivote estadounidense, Matthews con 23 puntos, quien estuvo bien escoltado por Hopson (6), Ferreyra (7), Eseverri (7) y Smith (9). Por el lado de la visita, la actuación fue algo más que discreta y solo se destacaron por su presencia en el goleo, Alston (13), O´ Bannon (8) y Brussino (7). Con esta victoria el equipo dirigido por Luciano Martínez, llega al encuentro del domingo frente al duro Gimnasia – Indalo de Comodoro Rivadavia con un poco de aire, a pesar de seguir naufragando en la parte baja de la tabla de posiciones. El primer cuarto arrancó con ambos equipos ganando en el poste bajo del rival, producto de errores en la coordinación defensiva; pero el que halló mayores regalías fue la visita ya que si bien predominó en el tanteador la dupla Alston (7) – Diez (4), todos sus hombres sumaron; mientras que en el tricolor todo se resumió a lo que Matthews (12, en este parcial) con lucha generaba, a pesar de esa diferencia, Quilmes, termino los primeros 10 minutos 16-17, abajo. El local entro enchufado al segundo cuarto y de entrada con un bombazo de Eseverri, desde tercera dimensión, se puso arriba en el marcador, a partir de allí controló las acciones ante un Boca que, con los relevos perdió fuerza en ataque y defensa, lo que obligó al “Huevo” Sánchez a enviar nuevamente a Alston, Diez y Stanic, al campo de juego, pero ni eso alcanzo, porque el dueño de casa estaba muy firme atrás y efectivo en el aro rival, con muy buenas actuaciones de Vildoza y Piñero, desde el banco y de Matthews, Ferreyra y Hopson, del quinteto inicial. Tal fue la superioridad del cervecero en este parcial que saco una diferencia de 12 puntos para irse al descanso ganando, 39-27. Quilmes volvió del descanso dispuesto a mantener la ventaja y con una buena defensa, que le cortaba los caminos al gol a un conjunto de la Ribera muy errático, la brecha en el marcador parecía no correr riesgos, sobre todo porque en ataque la noche de los dirigidos por Martínez era perfecta, ya que a lo realizado por Matthews y compañía hasta ahí, apareció Smith con dos bombazos de tres y el cervecero entró al cuarto decisivo ganado por un inapelable, 55-37. La baja producción ofensiva de Boca (0/19 en triples; 18/41 en dobles y 11/20 en libres), como resultante de una férrea marca propuesta por Quilmes y de la falta puntería propia, sumados a la magnífica actuación de Matthews (23 puntos, 9 rebotes (1 ataque y 8 en defensa), 1 asistencia y 4 robos) en ambos aros, fueron las claves del triunfo cervecero, pese a que en algún segmento del capítulo final mermo su intensidad, el resultado jamás estuvo en peligro, por eso los dirigidos por Martínez coronaron una victoria con sabor a paliza por 67-47. SINTESIS: QUILMES (67): Ferreyra (7); Hopson (6); Eseverri (7); Weigand (4); Matthews (23) (F. I.); Vildoza (0); Piñero (3); Sciutto (2); Truscott (6); Smith (9). DT: Luciano Martínez. BOCA JR. (47): Stanic (3); Brussino (7); Diez (4); O´ Bannon (8); Alston (13) (F. I.); Fierro (2); Nocedal (4); Graves (5); Martina (0); Delia (1). DT: Oscar Sánchez. Parciales: 16-17; 39-27; 55-37; 67-47 Árbitros: R. Smith – O. Bautista Estadio: Polideportivo Islas Malvinas. Por: Alejandro Maldonado Casamajor. En Twitter: @alemaldonadopd
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